as usual

Este libro lo leí el año pasado, pero recién hoy día noté esto:

"Suele ser ordinario, y hasta banal, el primer encuentro de dos personas que luego se enamoran. Puede que a algunas les parezca difícil de creerlo, sobre todo a aquellas que tienen fe en principios grandiosos como la predestinación, el destino y la existencia de almas gemelas; pero, por regla general, la banalidad es la norma"
(Adam Thirwell, Política)

Cierto, muy cierto. La banalidad es la norma.

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Anoche tomé un taxi desde la casa de D tipo 3 am hasta mi casa. Unos 20 minutos casi siempre, se convirtieron en 10. Veníamos tan rápido por Vespucio que estuve a punto de retar al taxista, pero me dio nervio. No sé. Me imaginé que se enojaba y me dejaba botada en medio de la nada. Qué tonta. Al final opté por conversar con el, para ver si se distraía de su jueguito de adelantar a todo el mundo. No me contó nada muy interesante la verdad, pero me dio una tarjeta de descuento. Siempre veo que C -de C y D- habla con los taxistas. Supongo que se debe a que está un poquillo borracho y se le suelta la lengua, pero al final todas las veces que he andado en taxi con el, el chofer nos cuenta algo entretenido. Mi taxista era fome.

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Momentos a los que me gustaría volver siempre:

-Cualquier despegue de avión. Me encantan. No soy muy adicta a la adrenalina (de hecho, nada), pero la sensación de estar agarrando vuelo y después estar subiendo muy muy rápido me fascina.

-Momentos tontos, calmados, obvios, donde-todo-está-bien. Pueden ser tanto en una fiesta, como comprando el pan o echada en la arena mirando el mar. Esa sensación de que nada podría echar a perder algo. Todo está tranquilo, no hay nada ni nadie por qué o quién preocuparse. Creo que pasé tanto tiempo con algo en la guata que me hacía pensar lo peor, que ahora busco esos momentos como coleccionista.

Just some kind of life with the edges taken off (Pulp)

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