dancing with myself
Odio al facho de Iván Valenzuela.
***
Lo bueno de ser una inconsciente es que nadie te puede decir nada. O nadie siente las ganas de decirte cosas porque ya saben cómo eres. Entonces piensan que eres un caso perdido y se quedan callados. Los más entusiastas tratan de decirte lo que tienes que hacer, pero con el tiempo se dan cuenta de que tengo la capacidad de quebrarle el espíritu a casi todo el mundo.
***
Hoy es uno de esos días perdidos y muertos. Donde no pasa nada porque todo anda demasiado lento. Todas las cosas que iba a hacer no las hice. Como ir a buscar unos libros o ir al cine a ver Match Point. Como leer algo para un prueba que tengo a pesar del paro. Como estudiar para una odiosa disertación que tengo el martes. En cambio, me he dedicado a mirarme las manos y a quedarme pegada pensando. En nada en especial. Un poco en lo raro que es liberarse de las obsesiones. Porque de un día para otro te quedas sin karma. Y aunque no tenga nada que ver, me acordé de una escena de Annie Hall donde sale un tipo hablando por teléfono y diciendo: olvidé mi mantra. No sé qué se hace cuando el asunto que más se repetía en el día deja de tener importancia. Lejos de alivio, siento una especie de horfandad. Será que mis obsesiones están demasiado arraigadas y me cuesta deshacerme de ellas aunque ya no tengan un sentido. Pero una vez que se pierden, es complicado volver a restablecerlas, sobre todo pensando que es algo que hace mal. En fin.
5 comments:
jajaja
lei la primera linea y explote.
es como en jerry maguire.
You had me at "hello."
Oye, juntémosnos esta semana como habíamos quedado, te parece?
Yo puedo el martes y miércoles en la tarde, dime tu que día y listo!
Besos!!
voy a pensar lo que yo quiera, me importa un higo, me importa un higo me importa un higo lo que pienses.
porque tengo mi, tengo mi, tengo mi autoestima
no te preocupes, seguiré posteando con la frescura y espontaneidad que me caracteriza
Post a Comment